lunes, 11 de noviembre de 2019

La verdadera lucha empieza hoy



Al entrar hoy en mi oficina a las ocho de la mañana, después de una noche electoral diferente, en la que por primera vez en muchos años tenía verdadero interés en conocer los resultados, ya sabía lo que me esperaba. Sonrisas cómplices de algún compañero y caras largas de muchos otros. Por aquello de que muchos me tienen catalogado como “facha” (¿por qué será). Algo que por cierto hace años que me la trae al pairo, más aún cuando los que lo piensan se cierran en banda ante cualquier diálogo serio, argumentado, que sirva para explicarles que no somos demonios, ni nos comemos a los niños recién nacidos (eso lo hacen ellos tolerando y promocionando el aborto), ni apaleamos a los inmigrantes, ni odiamos a nadie.

Ellos a lo suyo, erre que erre, siguiendo los dictados del mainstream, de los medios "progres" y del lavado de cerebro al que les han sometido durante tantos años: cualquier cosa que no sea “progre”, que no se precie de ser de izquierdas, representa el mal. La democracia para ellos se limita a aquellos que piensan (si es que tienen esa capacidad) tal como dicta su histórica arrogancia y su complejo de superioridad.

Allá ellos, sigan pues viviendo acongojados en su ignorancia, odiando sin un ápice de razón ni base histórica, apoyando ideas retrógradas, fracasadas, injustas y malas, como han sido y siguen siendo el socialismo, el comunismo y todas sus variantes. Solamente hace falta echar una mirada a como “celebraron” o citaron los medios progres las celebraciones del 30 aniversario de la caída del Muro de Berlín, para darse cuenta de su carencia de cultura, de un mínimo conocimiento histórico y de sensatez: ni una palabra sobre el origen del Muro, la maldad del sistema socialista/comunista que lo levantó y la libertad que se consiguió para la Humanidad gracias a su derribo. Confundiendo churras con merinas. Al estilo Adriana Lastra y demás borregos.

Lo mismo que les pasa ahora ante los resultados de las elecciones. La campaña de acoso y derribo, de paparruchas, de manipulaciones, de rebuscar en el pasado de todos y cada uno de los nuevos diputados de VOX, de invenciones, de insultos, de manifestaciones, de escraches, se prevé terrible. Y continuada. Ya se ha vivido antes en los demás países de Europa: teniendo el entorno izquierdista y falsamente llamado progresista el dominio absoluto de los medios de comunicación, el ataque continuado contra cualquier opción patriótica, sensata y cristiana, basada en valores superiores, en la unidad, el esfuerzo, el trabajo, la familia y la justicia social real está garantizado, y será vilipendiada, ultrajada, insultada y perseguida desde el minuto uno. Es decir, desde ahora mismo.

Por eso he titulado este artículo “la verdadera lucha empieza hoy”. Porque tengo muy claro por donde van a ir los tiros. Y esperemos que se quede todo en “tiros” virtuales. Porque de esta gente poco te puedes fiar, son socios políticos de terroristas y golpistas separatistas. Y de esa relación interesada con los malvados a pegar tiros en la nuca hay un pequeño paso. Ya lo hemos vivido en otras épocas. Oscuras.

Ahora a por lo bueno. A felicitar de todo corazón a mis amigos, mis camaradas, que después de una travesía en algunos casos de más de 40 años luchando por España (como bien dijo ayer Juan Ricart en nuestra tertulia, ahora por desgracia convertida en un grupo de Whatsapp sin picoteo ni vino español) y defendiendo unos ideales con los que me identifico plenamente, han llegado al Congreso de los Diputados y antes al Parlamento Europeo. ¡Chapó por vosotros!

No hablo de extraños, ni de conocidos de bar, fiesta o guateque. Hablo de personas ejemplares, de luchadores, que desde mi ya lejana juventud han estado ahí, estudiando, trabajando, avanzando, triunfando, dando ejemplo a todos nosotros. Y no son lisonjas gratuitas. Son sentimientos que me salen de dentro, que me reafirman en mis creencias, realidades que me enorgullecen.

Poder comentar con la cabeza alta y una sonrisa de oreja a oreja que conozco a eurodiputados y diputados, que me precio de ser su amigo, no tiene precio. Más bien es un gran placer. Y sobre todo un honor.

Sabemos bien que en todos lados cuecen habas, que no es oro todo lo que reluce, que siempre habrá que separar el trigo de la cizaña. Tampoco es nada nuevo. Al caballo ganador, sabiendo como ha acabado la carrera, apostaría hasta el mayor ignorante. Y habrá intentos de infiltración, largas colas para chupar del bote, conocidos olvidados que llamarán a la puerta, oportunistas de tres al cuarto que pretenderán sacar tajada de los resultados electorales. Como en todos los partidos, agrupaciones, grupos de amigos y clubes sociales.

Pero conociendo a las personas que conforman la dirección de VOX, por lo menos a una buena parte de ellas, no tengo ninguna duda de que sabrán estar a la altura, y que gracias a ellos hemos dado un paso más en pos de esa España grande, libre, justa y eterna que siempre hemos soñado.

Y que nos representarán con la misma nobleza, la misma sinceridad y el mismo esfuerzo que han demostrado en los últimos decenios en los que hemos compartido ideales, luchas, ilusiones, decepciones, victorias y derrotas.

La verdadera lucha empieza hoy.

Pero partimos con una gran ventaja: estamos en buenas manos. Muy buenas.

Felicidades, Jorge, Juanjo, Juan Carlos, Gerardo, Joan, Jordi, Nacho, Lola, Agustín, Paqui, Amanda, José Manuel, Miguel Ángel y todos los demás que habéis contribuido con vuestra incansable lucha a que el sol vuelva a brillar en la piel de toro.



Quien esperar puede, alcanza lo que quiere.





No hay comentarios:

Publicar un comentario